¡Qué emoción conocerte!

Me llamo Laura y soy la creadora de todo esto que ves por aquí...(que sinceramente espero que te esté gustando).

Subo recetas a diario en Instagram, Youtube, Tiktok y Pinterest, para que tengas donde elegir y me apasiona aprender sobre la dieta Keto de la mano de expertos y contártelo de una manera sencilla de entender.

Mi historia con la dieta Keto (vaya camino)

Empecé la dieta Keto en 2019 y perdí cerca de 20kg pero lo hice de mala manera: sin saber mucho lo que estaba haciendo, con el objetivo de adelgazar deprisa y castigándome cada vez que me saltaba la dieta.

Obviamente al hacerlo solo por perder peso rápido y al no haber arreglado mi relación con la comida en cuanto las cosas se torcieron en 2020 volví a recuperar todo el peso que había perdido (no hace falta que te diga como fue 2020, porque fue un drama para todos).

En 2021 decidí comenzar de nuevo con la dieta cetogénica pero abordándola desde una perspectiva relajada, donde trabajaría mi relación con la comida y no marcaría ningún alimento como malo o bueno, sino que contaría carbohidratos... Y ahora me siento mejor que nunca, con muchísima energía no sé cómo explicarlo pero me siento "yo". Y como esta pregunta me la haceis todos los días, sí de Marzo a Agosto 2021 he perdido más de 20kg.

No hay prisa por adelgazar, hay prisa por empezar a cuidarse.

Te puedo decir que engordar en 2020 fue de lo mejor que me ha pasado.

No te voy a mentir, mi primera reacción cuando engordé fue de: "¡FIN DEL MUNDO! Estoy gorda, oh no, ¿qué voy a hacer? Ahora mi cuenta no tiene sentido...y no le voy a gustar a nadie... ¡soy un fracaso!"...

Pero seguí trabajando duro, trayendo recetas a diario, generando contenido gratuito y ayudando a miles y miles de personas en su camino...Yo estaba haciendo "como si mi aspecto físico no pudiera frenar mi éxito" (ahora suena absurdo que el espacio que yo ocupase en este planeta tuviese algo que ver con mi éxito a la hora de ayudar a los demás con recetas).

Y no te lo vas a creer pero ¡SORPRESA! a la gente no le importaba mi aspecto físico y mi cuenta siguió creciendo como la espuma.

Al darme cuenta de esto decidí centrarme en arreglar mi relación con la comida, en aprender a mirarme al espejo, en obligarme a hacer pequeñas cosas por mi salud mental, en no tener prisa por adelgazar pero sí por cuidarme.

Y es ahí cuando me cambió la vida.

Oye y si ¿hablamos?